El dia que casi todo sucedio!

Siempre me he considerado una chica decente; todavía a pesar de mi edad, no sé que es masturbarse y no he visto películas porno, y por supuesto Todavía soy virgen; porque siempre había algo que me detenía... un miedo que desapareció cierta noche que estaba con un amigo.


Era un amigo con el que pasaba mi tiempo libre con él; solo les diré que tiene esa mirada de perversión que a las mujeres nos encanta...

Yo comencé a ponerme muy nerviosa cuando me preguntó si podía ir a recoger algunas cosas que había olvidado, yo pense por que no, igual en ese momento no tenia nada que hacer y estuvimos allí durante largo rato, en su casa. No se si lo de ir a su casa era una excusa para estar a solas, pero quiesiera pensar que no fue asi.

Yo estaba cansada porque la noche anterior nos habiamos desvelado por ir a una fiesta que duro hasta las 7 de la mañana, por lo que me recosté en su cama y le dije que se recostara conmigo y esa fue mi perdición.

Estábamos abrazados y de repente me tocaba la cara o me besaba y me besaba suavemente el cuello y comentaba que yo le gustaba mucho, la verdad yo no me imaginaba lo que sucedería más tarde pero sólo atinaba a decir que tenía algo de calor.
Comenzó a hacerse más tarde y comenzamos a calentarnos. Sus besos ya no eran tiernos sino llenos de pasión, buscaba mi boca pero yo trataba de evitar que me besara con desesperación, mientras que con sus manos recorría mis firmes senos, al principio trate de evitarlo pero despues de un rato, ya no pude mas.

Despues de unos minutos, sus manos comenzaron a bajar por mi vientre intentando desabrochar mi pantalón, fuera de mí, y con miedo le dije que no sería buena idea el hacerlo. Despues de besarme el cuello y morderme en repetidas ocasiones, mis nervios estaban a mil.

Me recostó y se puso encima mió, besándome y desabrochándome lentamente la blusa... siguió recorriendo con su boca mi cuello hasta llegar a mis senos, los cuales no deje que me besara... yo sólo daba pequeños gemidos de placer, el miedo se había convertido en deseo.

De pronto me dijo, que era el día en que iba a hacer mi primera mamada, que me indicaría cómo hacerlo, porque sabia que yo era nueva en esto, a lo que sonreí y acepte gustosa (Porque no...).


He de decirles que tampoco había visto un pene en toda mi vida, sólo en la tele pero eso no cuenta. Cuando se sacó ese pene grueso y moreno me pareció hermoso, lo tomé con la mano izquierda y empecé a masturbarlo suavemente. Él sólo daba pequeños gemidos hasta que me animé y poco a poco me fui acercando.

No olía a nada, el líquido pre seminal tiene un sabor curioso aunque no desagradable. Comencé a darle tiernos besos en la polla mientras que con mi lengua jugueteaba con la punta, me la fui metiendo poco a poco a la boca y empecé a succionar y a apretar con mis labios el tronco, mi lengua seguía jugueteando, conociendo.

Pronto comencé el movimiento mete-saca, teniendo mucho cuidado con los dientes mientras que mi amor sólo gemía y se movía rítmicamente. Súbitamente me indicó que me la sacara de la boca lo cual fue bueno pues mi mandíbula dolía y seguí masturbándolo hasta que salió un chorro de leche, manchándole la blusa y mi mano. Antes de pararme probé un poco y estuve jugando con el semen, mi niña interior quedó también satisfecha, y los dos nos cambiamos y fuimos a la calle para ir a tomar un café.

Antes de despedirse me dijo "la próxima vez no te salvas" Y creo que fue lo mejor, hoy tengo ganas de más.