Colorín colorado.

Y el caballo blanco se detuvo ante la casita, y descendió el guapo, alto y valiente príncipe, de pelo negro engominado y ojos de color de la coca cola, y mientras con una mano golpeaba la puerta, con la otra sostenía unas bonitas flores.


-Hola, soy tu Príncipe Azul, y vengo a rescatarte del Ogro con el que vives, a llevarte muy lejos de aquí, donde seremos muy felices y nos casaremos... y tú serás mi Princesa.


Y ella que no podía creerlo, tantos años esperando que llegara ese momento... que terminó por olvidar que era eso lo que alguna vez quiso, (un Príncipe Azul con caballo blanco que no permitiera que existiesen malvadas brujas o feos ogros dentro de su cuento), y ahora estaba allí, delante de sus narices con unas flores en la mano...


-Sabes qué, me cansé de esperarte... Además, quién dice que yo quiera ser tu Princesa pudiendo ser la reina de mi casa... Y en cuanto al Ogro... vale, será gruñón y no demasiado agradable, pero es mi Ogro, y... no lo cambio por ningún Príncipe Azul...


Lo siento -dijo- cerrando la puerta en las narices del principe.

El y Ella

Era el mejor contador de historias del mundo. A ella le encantaba cuando le habla de sus historias, cuando intentaba impresionarla con sus "aventuras peligrosas" (y ella siempre se impresiono, claro).

Cuando se reía se le notaban los hermosos dientes que tenia y el disfrutaba con ver como ella se divertía.

A ella le gustaba su manera de ver la vida (aunque rara vez coincidían).
El era el chico más cortés que ella conocía; yo creo seriamente que el en otra vida fue un poeta.

El intento enseñarle a vivir con el corazón y no con la cabeza, que piense menos y actúe más, que haga lo que haga no se arrepientiera, y siempre que lo haga sea con el fin de sentirse mejor. (Ahí también pensaban diferente).
Pero sin duda, lo que más le atrajo a ella, es cuando clavaba sus ojos marrones (serenos) en sus ojos verdes (inseguros) y le decía una frase tranquilizadora y después la abrazaba fuerte y se ivan los dos en la moto felices de la vida.

una historia vieja

Nuestra historia no fue de esas que se escriben en postales, ni en portales a media noche, la nuestra fue más bien de esas que se escriben en las mesas al rededor de una taza de cafe y mientras fumabas tus Parisienne cigarette...

¿Te digo otra cosa?...odio la manera en la que te fuiste, arrasando con todo, dejando ese enorme agujero negro en mi vida, robándome la capacidad de querer como quise e incluso secuestrando mi inspiración... lo peor es que nunca pediste un rescate...

lo cierto fue que el cadaver de mi amor fue descubierto la mañana del 13 se septiembre del 2004 cerca del las cuatro de la tarde, atado de pies y manos con por lo menos un tiro en la cabeza y calcinado parcialmente.

viceversa

Quiero quererte...
pero no quiero que creas que es necesario que nos querramos,
(ya se que en las cosas del querer no eres buena)
siempre acaban queriendote más de lo que tu quieres...