No gasten palabras ni pierdan el tiempo
hablándome mal de ella porque ella es mi amor.

Qué importa si viene de un triste pasado,
yo también regreso de un mundo de horror.

Soy hombre y me pongo en juez y culpable,
mil bocas mintieron porque yo mentí,
no puedo juzgarla porque yo he rodado
y sé lo que cuesta con honra vivir.

No me hablen de ella...
si vivo en sus besos un mundo mejor,
las cuatro paredes que encierran mis horas
son en su ternura un nido de amor.
No me hablen de ella...
porque es un pedazo de mi corazón,
la quiero y si un día precisa mi sangre,
mi sangre y mi vida por ella la doy.