No te engañes


Tú no seas como todos los que miran
y ven el mismo paisaje:
un extenso valle
y en medio un árbol solitario.
Acércate al árbol verás entre sus ramas
un nido
escucharás al viento que sacudiendo sus hojas
parece murmurar oraciones
verás cómo a las raíces gruesas las abraza
con fuerza de madre la tierra.
Tú no seas ciego y sordo como todos los que miran
y ven un paisaje desolado
donde en verdad hay vida
movimiento y música.