De repente.


Se me ocurre así, repentinamente,
regalarte unas palabras,
unas notas, unas frases, un poema;
tú lo haces constantemente
sin tregua, sin descanso,
me regalas tu risa, tus encantos.

Tal vez sin darte cuenta
o a propósito, me acompañas,
en mis sueños, en mi calma.
tal vez sin darte cuenta
o a propósito, te has metido
en mi corazón, en mi vida,
en mi alma.


Déjame que te muestre,
aunque sea a propósito
o sin darme cuenta,
un sentimiento, una luz,
un emblema.

Déjame que te diga
de qué forma lo siento,
deja que acuda a tu encuentro
déjame que te escriba  estos poemas.