La vida

La vida humilde te abraza, te despierta,
te cachetea, te enseña...
 Te ofrece Paz, la tomas o la dejas.
Te dice que para vivir es mejor sentir,
  que para sobrevivir, mejor no  pensar.
 Te hace conciente,  poco realista
un poco soñador. te deja jugar, aventurarte.


Te abre puertas, algunas veces te las cierra.
te sienta a un lado del timpo para que lo
 veas pasar asi sea un minuto,
 para que no te apures porque
apuràndote vivìs mañana y no el hoy.


Te observa y te deja entrar,
te deja ver sus mares, su sur, su norte,
sus ciudades, sus pueblos, sus culturas,
sus sabores, te deja ver a su gente
porque su gente te quiere ver.


La vida es  humilde es romàntica,
aqui puedes ser un soñador,
la vida es simple y llena de colores.

 Exquisitas sus comidas elaboradas
desde la sencillez de la madre tierra.
 Hijos del maiz o del Pan, hermanos del frijol,
compinches del tequila, camaradas del Vodka,
  amantes del mezcal o de la cheve,
 y de los tres juntos tambièn,
exòtico su picante a quien no todos nos atrevemos,
exòtica su manera de condimentar con todo a todo.


 Sabrosas son su musica en todos sus rincones.
 Sabrosa es su mùsica que mueve los cuerpos al compàs.


La vida te abre los sentidos,
 te ofrece todo, no te pierdas de nada.
Aquì y ahora, yo soy tù, tù eres yo.

La vida   choca tu mano,
enlaza sus dedos con los tuyos,
 estrecha el ìndice señalàndote,
te hace estrechar el tuyo, señalàndolo,
 còmplices de haber compartido,
 de saber que somos lo mismo,
la misma energìa.

 Miràndote a los ojos, y sin soltar tu mano,
compartela para que no se acabe,
para  que le enseñes a otros,
para  que regrese otra ves
 a vos mismo.